DELIMITACIÓN JURÍDICA DE LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA EN EL ORDENAMIENTO PERUANO

El problema, como siempre en el Derecho, son los límites: dónde comienza y dónde termina eso que llamamos Administración Pública. Un problema que, como también suele ser frecuente en el constante afán de los juristas por delimitar las realidades implicadas, creadas o trabadas por este conjunto relacional que es el Derecho, sólo puede encontrar una solución cabal, consistente, justa y generadora o promotora de justicia, ahondando en la naturaleza, en la razón de ser que justifica y debe informar y caracterizar a esa realidad jurídica de cuya delimitación se trata. ¿Qué es, pues, la Administración Pública? ¿Cuál es su razón de ser, su sentido institucional en el Estado social y democrático de Derecho, en sus diversas formas posibles, además, de autonomía y descentralización? ¿Qué notas, qué condicionamientos o exigencias deben, entonces, presidir su configuración estática y dinámica? Preguntas todas, como puede suponerse, verdaderamente capitales para el Derecho Público contemporáneo, cuyo interés e importancia no se reduce en modo alguno a lo académico, sino que, por sus muchas implicaciones para una más racional y justa ordenación jurídica del poder público que más incide en las vidas de todas las personas, puede afectar de manera muy relevante —como todo lo verdaderamente académico— al presente y futuro de la marcha de la sociedad. La paz y el desarrollo dependen a la larga, en muy gran medida, de este tipo de cosas, cuando se abordan y tratan con el rigor que la ciencia requiere.